El Embalse y Presa de Peñarroya
26 marzo 2012Hace unos días hicimos una escapadita al Parque Natural de las Lagunas de Ruidera, una de nuestras primeras paradas fue visitar la presa que contiene las aguas del embalse de Peñarroya, pese a la época de sequía que estamos experimentando, la presa albergaba bastante agua, de hecho, mucha de ella saltaba a borbotones por el aliviadero superior del a presa de hormigón.
El Castillo de Peñarroya a orillas del embalse de Peñarroya
Cogimos un camino de servicio que estaba indicado en la carretera comarcal CM-3115 que viene desde Argamasilla de Alba (Ciudad Real), el camino pedregoso nos llevo hasta el pie de presa, desde donde se podía ver el salto de agua del embalse de Peñarroya, una de las cosas que más nos sorprendió fue lo cristalina que estaba el agua, el hilillo de agua que en ese momento era el Guadiana, era transparente y de un tono jade realmente bonito.
Justo al lado de la presa se encuentra el famoso Castillo de Peñarroya, es más, el paso hacia la parte superior de la presa se encuentra en pleno patio de armas del castillo, más adelante os hablaré y os mostraré fotos de este excepcional castillo medieval de origen árabe.
Tras subir a una de las murallas del Castillo de Peñarroya pudimos divisar un panorámica espectacular del embalse de Peñarroya, de repente los tonos aguamarina, malaquita, turmalina, turquesa y jade empezaron a estar presentes en las fotografías que sacaba de la presa de Peñarroya, un espectáculo de color que contrastaba con la sequedad y aridez de aquella tierra.
Restos de una antigua dependencia del Castillo de Peñarroya anegada por las aguas del embalse
El embalse de Peñarroya, como muchos otros de la geografía española se construyó durante la dictadura franquista, su principal utilidad es la del abastecimiento de agua potable para las localidades cercanas y para el regadío de los campos manchegos, también es muy conocido por los amantes de la pesca que cada fin de semana toman las orillas del embalse en busca de una captura digna de fotografía.
También, en verano el embalse de Peñarroya es el segundo destino de baño dentro de los límites del Parque Natural de las Lagunas de Ruidera, sus aguas limpias, cristalinas y de tonos verde-azulados son realmente apetecibles en la época estival.
Sin duda, hacer una visita al embalse de Peñarroya merece mucho la pena, por la belleza de su enclave, por la espectacularidad de la fortaleza medieval que se levanta a sus orillas, por la explosión de color que sus aguas vierten en nuestros ojos, porque forma parte del Parque Natural de las Lagunas de Ruidera y es un lugar lleno de sorpresas de gran belleza natural. Para alguien que tiene a La Mancha como una llanura baldía, seca y árida, una visita a este lugar le va a sorprender y hará que cambie de opinión.
Podéis ver más fotos en el set de Flickr: Parque Natural de las Lagunas de Ruidera
¿Dónde está el embalse y presa de Peñarroya?